Compartamos felicidad mediante el amor de la Madre

El poder del amor era enorme y magnífico. El 17.º Concierto Nueva Vida se llevó a cabo bajo el lema “Compartamos felicidad con el amor de la Madre”, y el lugar mostró el poder del mismo. En un clima cálido e inusual de invierno, una gran multitud de 20 000 personas se reunieron en el Gocheok Sky Dome, el mayor polideportivo cultural de Corea, el cual se llenó de su fervor.

El Concierto Nueva Vida de la Fundación Internacional WeLoveU ha traído calidez al prójimo en el país y el extranjero en el frío invierno. El 18 de diciembre, a las 4 p. m., se llevó a cabo el 17.º Concierto Nueva Vida en el Gocheok Sky Dome de Seúl. Este concierto fue patrocinado por el Ministerio de Salud y Bienestar Social, el Gobierno Metropolitano de Seúl, el Gobierno Provincial de Gyeonggi-do, el Hospital General Sejong, y la Red de la Asociación Coreana para la Prevención del Abuso Infantil. A este concierto asistieron muchas personas de todos los ámbitos: la Presidenta de la fundación Zahng Gil-jah; los directivos de la fundación, el director del Hospital General Seojong, Lee Myeong-mook; el presidente de la Red de la Asociación Coreana para la Prevención del Abuso Infantil, Yi Bae-keun; grupos diplomáticos y sus familias procedentes de veinte países, entre ellos el embajador jordano en Corea, Adel Mohammad Adaileh. Más de 20 000 miembros y ciudadanos llenaron el vasto Gocheok Sky Dome y pasaron el fin de año, ofreciendo su consuelo y esperanza al prójimo que atraviesa momentos difíciles.

En el discurso de apertura, la Presidenta Zahng Gil-jah explicó el propósito del evento: “Este concierto se organizó para nuestros vecinos que sufren de desastres, pobreza y enfermedad en todo el mundo. Por favor, inspiremos valor y esperanza a nuestro prójimo que está aquí, con vítores y fuertes aplausos”. Además no olvidó agradecer a los miembros e invitados que asistieron. Asimismo, deseó que el próximo año nuevo fuera un año lleno de alegría y esperanza para todos: “Dejemos atrás el viento frío de diciembre, la desesperación de nuestra sociedad, y el dolor y la tristeza que cada uno tuvo en el año 2016. Hoy, espero sinceramente que tengan un momento hermoso y valioso”.

El Patrocinador Principal, Lee Soon-jae no pudo participar en el concierto este año, pero envió un mensaje de vídeo. Y fue seguido el saludo del Presidente de la Red de la Asociación Coreana para la Prevención del Abuso Infantil, Yi Bae-keun. Tomando el ejemplo de la Estatua de la Madre Patria en Ucrania, que representa a una madre esperando que su hijo regrese del campo de batalla, recordó el significado del evento: “La torre de amor de la Madre se ha construido aquí para nuestro prójimo desfavorecido, que está luchando arduamente en su vida difícil que es como un campo de batalla”. El embajador de Jordania en Corea, Adel Mohammad Adaileh, también ofreció un discurso de felicitación y elogió generosamente las actividades internacionales y multifacéticas de la Fundación Internacional WeLoveU. Pidió que prestaran mayor atención a los refugiados que habían perdido sus hogares, explicando que estaban aumentando las personas que sufren de conflictos y desastres.

En la ceremonia de entrega de donaciones, a nuestro prójimo que sufre de desastres y pobreza en cinco países (Ecuador, Myanmar, Vietnam, Chile y Paraguay), se les proporcionó instalaciones educativas, artículos de primera necesidad, y gastos médicos; y los gastos médicos y de manutención fueron entregados a 67 hogares nacionales que habían sido excluidos del servicio social gubernamental. La Presidenta Zahng Gil-jah entregó personalmente los certificados de patrocinio y regalos a los beneficiarios invitados, y los consoló tomando sus manos. Los miembros de la fundación y los ciudadanos les prodigaron aplausos de ánimo.

Cuando se dio inicio a la segunda parte, el actor Kim Seong-hwan, dirigió el concierto con su ingeniosa capacidad presentadora esa noche. El Coro Infantil Nueva Vida nos sumergió en el mundo de la infancia; interpretaron diferentes canciones y representaron bailes; una copla que entona el amor y la esperanza, y una canción alegre que nos hizo sentir ganas de bailar. El elenco se tensionó y abrumó por el enorme escenario y numeroso público, pero como estaban allí para compartir y donar sus talentos, llenaron el escenario con más pasión luminosa que nunca. Cada fin de año, esperan con impaciencia el Concierto Nueva Vida, ya que se conmueven mientras cantan. Este año, ofrecieron un mensaje de apoyo: “Lo más importante es no perder la esperanza”.

La audiencia siguió las canciones junto con el elenco, y cada vez que finalizaba un acto, daban fuertes aplausos y gritos hasta hacer retumbar el estadio. Las luces, que llenaban el recinto, coincidían con las canciones y creaban un magnífico espectáculo. Los beneficiarios también disfrutaron un buen momento, observando el concierto después de recibir sus certificados de patrocinio.

“¡Estoy feliz! ¡Los amo! ¡Gracias!”

Un ama de casa filipina de una familia multicultural vino con su hija de 10 años, y lo único que decía en su incipiente coreano era: “Estoy muy feliz de estar aquí”. También había una señora inmigrante de unos 60 años, y manifestó que incluso pensó en renunciar a su vida porque se sentía demasiado cansada, herida y solitaria, viviendo en un país extranjero. Afirmó: “Me siento muy reconfortada porque numerosas personas se acercaron a animarme”. Estaba muy feliz y agradecida con todos. Los demás beneficiarios también expresaron lo agradecidos que estaban: “No teníamos ninguna oportunidad de contar nuestras dificultades a nadie. Era difícil vivir y no sabíamos qué hacer. Muchas gracias por darnos su atención y por ayudarnos en esta situación”.

Un estudiante extranjero llamado Wajid (de Seo-gu, Daejeon-si, Corea) fue invitado al concierto por un miembro de la fundación. Llamó la atención con su alegría y talento durante todo el concierto. Cuando terminó el concierto, no podía ocultar su abrumadora expresión. “Aunque somos de diferente país, cultura e idioma, podemos comprendernos mutuamente en el lenguaje del amor. La vida para los demás es sublime, pero difícil. Estoy orgulloso de todos los miembros que están haciendo esto”, manifestó Wajid.

En el Concierto Nueva Vida no escatimaron consolarse y animarse recíprocamente. Fue realmente un lugar de curación donde no había el que da y el que recibe por separado. La audiencia deseaba que el concierto continuara, pero se marcharon hasta el próximo evento, esperando que se grabara en sus corazones.